jueves, 15 de enero de 2015

Periódico Lavapiés Agosto 2014



Pasarela de Adoquines
LA VIDA DE LA MODA.


La moda es como la vida de cualquier persona: Nace, se reproduce y muere.

Incluso, por las últimas tendencias del mercado, hasta vuelve a la vida. Y para las personas que en su misticismo avalan la reencarnación, me darán un poco de razón.

En cualquier lugar, puede nacer. A diferencia de los seres, la moda no nace de una unión corpórea. No hace falta magia ni química. Sólo la libre voluntad de crearla.

Los genios no crean Moda, crean artificios que pueden serlo, o no.

Los que las crean son las personas que pasean por nuestra particular pasarela de adoquines, y prueba de ello es esta historia.

Una tarde Veraniega, como cada día, unas personas estaban tomando algo en su terraza favorita de la Calle Embajadores, al amparo de la sombra.


Faltaba el momento en el que, como casi siempre a las mismas horas llegara él. Un joven negro, con semblante serio e, incluso, distante. Nos viniera a ofrecer sus películas como siempre. Y yo, dándole una repetida negativa cada día.


Un día, a su oferta añadió unas graciosas pulseras de abalorios redondeados amarillas, rojas,verdes y negras. Las cuales desde que las ví, siempre me apeteció coger una, pero siempre me pillaba sin dinero, solo con la tarjeta o siendo invitado por un amigo.

Un buen día, el destino por fin nos unió, teniendo un euro listo para comprarle una de sus pulseras, estando acompañado de cinco personas más. Las cuales, asiduas como yo a la misma terraza, no dudaron en seguir la pequeña moda que proponía.

Poco a poco, todos fueron haciéndose con las suyas. Y de una simple y sencilla pulsera, ahora puedes apreciar que todos en esa terraza poseen una. El semblante del joven, ya no era serio y mucho menos distante. Regalándonos una sonrisa cada día. Y a veces, incluso, nos acaricia la oreja, una forma tierna y diferente que tiene Él de agradecimiento.

Ese es el espíritu de la Moda, las ganas de nacer, las ganas de tener algo parecido unos de otros y algo que les haga miembros de algo.

Cualquiera puede crear Moda con un simple gesto, solo hay que que querer que nazca. ¿Y si ponemos de moda ser nosotros mismos? Solo tendríamos que ponernos todos de acuerdo en respetarnos unos a los otros. ¿Lo ponemos en práctica?




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